Esos pequeños placeres

Mi caja actual tiene un pequeño fallo de diseño: el conector frontal de USBs está muy cerca de la salida de auriculares, por lo que no puedo conectar a la vez los cascos y mi reproductor de MP3 para grabar cosas en él. Sin embargo, un poco más separada está la conexión de micrófono, por lo que se me ocurrió hacer un par de puentes para que el sonido salga por ésta, y así no tener problemas. Llevaba tiempo queriendo hacerlo, pero hasta hoy no saqué ganas.

¿Y qué tiene que ver ésto con el título? Bueno, la última vez que usé un soldador para hacer alguna chapucilla propia fue hace casi dos años, cuando amplié la memoria de mi Z88, y es también la primera vez que lo uso desde que me independicé. Volver a cogerlo, aunque fuese para algo tan sencillo, ha sido realmente agradable. No te das cuenta de lo mucho que echas de menos hacer algo hasta que lo vuelves a hacer y disfrutas. Llevo tanto tiempo concentrado en mi trabajo y en mis proyectos de programación que tengo la electrónica completamente abandonada.

Después de ésto quiero hacer algún proyectillo nuevo, pero antes tengo que comprar una mesa adecuada. ¿Por qué no hay un Ikea cerca cuando lo necesitas?

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